El otro día fue el día de la madre.
Mi hermano pensó en un regalo genial para ella: comprarle entradas para el concierto de Juan Luis Guerra que será en Julio en Madrid,que de pequeños le chiflaba.
Yo me quise apuntar al estupendo regalo y al final decidimos ir nosotros dos con ella,qué mejor compañía y plan que ir con sus dos hijos...
Pero se me hacía poco darle un sobre con un regalo que aún no fuera palpable,así que quise hacer una tarta bonita,petarda y cursi que le gustase en su día.
La receta del bizcocho es la de un bizcocho de yogur simple,que ya tenéis de mi tarta de fresas , solo que en este caso la he dividido en 4 moldes de 15 cm y le he añadido 350 gramos de arándanos ,lo que ha hecho que quede todavía más jugosa.
Para añadir los arándanos debéis lavarlos,secarlos muy bien y enharinarlos,para que queden en medio de la masa y no abajo del todo (si vais a dividir la masa en 4 no os hace falta la harina,porque quedan bien repartidos de todas formas).
Las flores de plástico las lavé y sequé un día ántes,son del ikea,y me pareció que los tonos quedaban muy bien juntos.
Los "pompones de lana" son de sostene grene ,una tienda sueca que tiene muchísimas chorradas preciosas y que adoro.
Para el frosting:
- 250 gr de queso crema (mascarpone en mi caso)
- 100 gr de mantequilla en pomada
- 100 gr de azúcar glass
- 200 gr de nata para montar
- 1/2 cucharadita de extracto de frambuesa o arándanos o fresas.
- colorante en gel rosa y amarillo,los míos son de la marca Wilton
Ponemos en el bol de la batidora la mantequilla y la batimos hasta que blanquee.
Añadimos el azúcar y batimos durante 3-4 minutos.
Añadimos el queso crema frío,y volvemos a batir hasta que se integre y cree una crema firme.
Añadimos ahora la nata y montamos la mezcla hasta que se creen surcos profundos.
Añadimos el estracto y batimos un par de segunditos más.
Dividimos la mezcla en 3 boles,de manera que en dos de ellos haya poco frosting y en el tercero haya bastante:
1-teñimos de rosa (bol pequeño)
2-teñimos de amarillo( bol pequeño)
3-lo dejamos como está (bol grande)
Colocamos los pisos de bizcocho con frosting entre medias,bien alineados y rectos los bordes,con el frosting sin teñir.
Os dejo una foto muy mala del corte en casa de mis padres:
Cubrimos toda la tarta con una capa blanca de frosting super fina,que nos servirá únicamente para sujetar las posibles migas que quieran desprenderse del bizcocho,y lo metemos en la nevera durante media hora.
Una vez se haya endurecido viene el proceso más complicado:
1-Ponemos la capa rosa abajo,circularmente,sin preocuparnos de como quede,solo aplicándola con nuestra espátula pequeña.
2-ponemos en medio la blanca,más ancha que la rosa,más del doble.
3-ponemos en la parte superior el amarillo.
Suponiendo que la altura de la tarta la dividimos por 5,el primer 5 debe ser rosa,los siguientes 3/5 serán blancos y el quinto superior restante será amarillo.
Y ahora si,comenzamos a alisar la tarta con una espátula grande ayudándonos de un gira tartas o algún plato giratorio.
El resultado será una tarta con cortes poco degradados y frosting restante multicolor...
Cogemos la espátula pequeña de nuevo y emborronamos los bordes del rosa con el blanco y del amarillo con el blanco,de manera que al volver a alisar,queden ahora si,degradados.
El frosting restante lo mezclamos,saldrá un color coral muy chulo,que utilizaremos para cubrir la parte de arriba de la tarta...y lista!!!
El truco para alisarla,al final del todo,y dejar un buen acabado (yo no soy la mejor pero lo he intentado hacer bien y bonito),es mojar la espátula grande en agua muy caliente;al calentarse la espátula,la secamos y la usamos para dejar ese acabado liso precioso.
Supongo que no os ha quedado muy claro del todo lo del alisado y el frosting,así que os dejo un tutorial que lo hace muy fácil.
Está en inglés,pero es muy visual y no hace falta entender nada :
Espero que os haya gustado,a nosotros nos encantó a tod@s!